En abril del 2007 se celebró en Beijing (China), la Primera Conferencia Internacional sobre la Prevención y Rehabilitación del Déficit Auditivo, organizada por la OMS junto con el Centro de Investigaciones para la Rehabilitación de Niños Sordos de China y la Federación China para las Personas Discapacitadas.
Uno de las conclusiones claves de esta conferencia fue “La Declaración de Beijing” que incluía la recomendación de establecer el Día Internacional para el Cuidado del Oído; con el fin de promover acciones sobre el cuidado de la audición y minimizar la ocurrencia de las discapacidades auditivas. La fecha propuesta fue el 3 de marzo debido a que la forma de sus números 3.3 es muy parecida a la de los dos oídos y se celebró por primera vez en el 2008.
¿Sabías que la pérdida de audición es la discapacidad sensorial de mayor repercusión a nivel global y es además un problema que va en aumento ya que en todo el mundo? Pues más de 275 millones de personas son sordas o padecen defectos de audición.
La sordera se define como la pérdida completa de la audición en uno o ambos oídos y por defecto de audición entendemos una pérdida completa o parcial de la capacidad de oír. Las principales causas de pérdida de audición pueden ser las siguientes:
La pérdida de audición puede prevenirse en gran parte con medidas de salud pública como la vacunación, el mejoramiento de la salud de la madre y el niño, y las prácticas seguras en materia de higiene del trabajo.
Para el año 2015, el tema es “Escucha de forma segura” y el propósito es llamar la atención sobre el creciente problema de la pérdida de audición inducida por el ruido. Es alarmante que millones de adolescentes y jóvenes están en riesgo de pérdida de la audición debido al abuso de los dispositivos de audio personales (incluyendo teléfonos inteligentes) o la exposición a niveles perjudiciales de sonido en lugares de ocio ruidosos tales como discotecas, bares y eventos culturales o deportivos.
Además, cabe destacar que la pérdida auditiva por causas recreativas tiene consecuencias potencialmente devastadoras para la salud física y mental, la educación y el empleo.